Lo que tu Bazo y Páncreas hacen por tí ¡Y QUE TU NO SABÍAS!

El elemento que regula al bazo y páncreas es la Tierra. Una persona que tiene sus órganos bazo y páncreas saludables y fuertes son compasivos, son personas que se sienten rápidamente aceptados y cómodos en un nuevo entorno. Son seguros de si mismos que no tienen ninguna necesidad de mostrarse nada, seguridad interior, tranquilos y calmados. Pero si sus órganos están débiles son personas inseguras lo que ocasiona querer llamar la atención o de cariño. Hay personas que no han recibido suficiente amor en su infancia o aquellos que han cambiado su residencia y su entorno al cual estaban acostumbrados.

Las personas con un desequilibrio de estos órganos muestran una clara deficiencia de compasión, suelen tener poca relación con otros, y los asuntos de los demás parecen no afectarlos. Suelen mostrarse con una postura critica en exceso hacia los demás y esconden la propia inseguridad tras duros juicios y falta de tolerancia. Con la ayuda de comentarios críticos intentan construir su propia superioridad. Otra expresión de las personas cuando están débiles estos órganos es la autocompasión y continuas quejas sobre la propia situación. Suelen hacerse los mártires, un ejemplo son las madres que se sacrifican por sus hijos sin permitirse nada para ellas. Están buscando seguridad constantemente y ¿donde la buscan? en la comida, en el fumar, o se apegan mucho a relaciones amorosas, buscando continuamente la seguridad del amor materno en sus relaciones. Así mismo si estos órganos están enfermos tienden a una compasión exaltada, una generosidad exagerada y un continuo desbordamiento de sentimientos que buscan la dependencia de los demás. Un ejemplo de esto serían las madres que no quieren que sus hijos se hagan mayores, tomando las decisiones por ellos y asumiendo sus responsabilidades. Estas personas tienen tendencia a frutos maduros, una dependencia de caramelos, su voz es como una de lloriqueos constantes y quejas.

Las cualidades de estos órganos son el pensamiento lógico y el intelecto racional, la capacidad de emitir crítica, de reflexionar y la buena memoria. Cuando estos órganos están en hiperfunción tienden a la ansia de conocimiento, de últimas noticias, o la adicción a la lectura. Las personas no pueden parar de pensar todo el día están analizando con un "monólogo mental". Tienen manías, obsesiones, coleccionan cosas.



El bazo regula la sangre. El mantenimiento del cuerpo y de sus funciones pasa tanto por la distribución de los alimentos como por el trabajo del sistema inmunológico, cuyos componentes varios pertenecen al bazo.


Hay una relación de importancia del bazo-páncreas y del estómago. Su campo de acción incluye enfermedades del sistema digestivo, como gastritis, úlceras de estómago y duodeno, ardores, digestión incompleta, pancreatitis, diarreas y estreñimiento; así como enfermedades del sistema inmunológico y alergias, enfermedades autoinmunológicas. Como el bazo regula la sangre entonces los problemas relacionados serían trastornos menstruales y dolores, pechos hinchados y trastornos de la lactancia, esterilidad, enfermedades de la piel (tono) edemas, enfermedades de los vasos linfáticos y de los ganglios linfáticos.

La tierra tiene según los chinos una función central. De ahí que tengamos equilibrio en todos los órganos de nuestro cuerpo, "tener los pies en la Tierra". Como nos presentamos, si nos encontramos con los pies bien puestos en la Tierra. Si nos sentimos "en casa" y protegidos, si nos sentimos bien en nuestra piel y si nuestro aspecto es saludable y vital. Todo esto depende de nuestra relación con la Tierra.
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